Todo
comienza como una tradición familiar, en donde las vísperas de navidad, tenían
la ocasión de esperar el reunir a la familia en torno al pesebre, aquel que en
medio del hogar adorna de gratos recuerdos la dicha del compartir juntos el
nacimiento del hijo de Dios.
Así,
con la llegada de un nuevo niño en el año 2009, una nueva esperanza se ve
reflejada en medio del grupo familiar, aquellos pesares y desuniones, serian
minimizados logrando este mismo año con el esfuerzo familiar abrir en nombre de
los niños de la familia y en adoración a estas imágenes del pequeño niño de Belén,
da su luz a la comunidad para expresar en la alegría de estas celebraciones las
diversas tradiciones que de manos de esta familia se conservan con el tiempo.
Si
bien es cierto la imagen del niño Manuelito estuvo desde siempre en la familia,
los abuelos Amanda Escudero y Carlos Letelier, mantuvieron junto a la imagen de
la Virgen el amor que por legado ofreciesen a la imagen de Dios, traído desde
Andacollo en 1963 aprox., con los años, llegando el niño nuevo, fue bautizado
cuyos padrinos son don Oscar Contreras y su Madre Sara Letelier.
Dentro
de las tradiciones de este nacimiento se encuentran las adquiridas como enseñanza
de la festividad de San Juan, que se efectúan en el inicio del nacimiento, como
el pago a la tierra y la celebración del cumpleaños del niño Jesús.
La
llegada de este nacimiento en medio de este barrio ha impactado fuertemente a
los vecinos que se han unido en medio de estas tradiciones y que esperan
ansiosos el sentirse parte de esta maravillosa expresión de paz.
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